200. Y cuando hayáis completado vuestros ritos, recordad a Al-lah ensalzándolo de una manera similar a como recordáis y exaltáis a vuestros antepasados (con orgullo), pero hacedlo aún con más fuerza. Hay gentes que dicen: «¡Señor, concédenos prosperidad en esta vida!», pero esos no recibirán su parte en la otra (porque solo se preocuparon por la vida mundanal y descuidaron la eterna).